Los cubiertos de madera que solemos utilizar en la cocina, con el paso del tiempo van sufriendo las inclemencias debido al uso diario. A pesar de esto podemos rejuvenecer su aspecto, de una forma muy sencilla.
Cogemos los cubiertos de madera, y los sumergimos en una solución con un litro de agua, y seis cucharadas de agua oxigenada ( también podemos utilizar en lugar del agua oxigenada unas gotitas de lejía). Mantendremos los cubiertos así sumergidos, durante un día entero.
Al día siguiente, los retiramos y los pasamos por abundante agua del grifo.
