¿Puede ser posible adelgazar tomando vino y jamón?

Aunque pueda parecer una invención, este régimen se está imponiendo. En parte porque no parece que se lleve una dieta.

Imagina por un momento que necesitas perder peso. Aunque en muchos casos es posible que no haga falta imaginar demasiado, pero este es otro tema. Ahora piensa que te sientas delante del dietista que te atiende y te recomienda comer vino y jamón ibérico para adelgazar. Es bastante probable que creas que te están gastando una broma y que busques la cámara oculta. Pero no es así. Es una dieta cada vez más consolidada, que siguiendo unas pautas concretas permite perder hasta 6 kilos en un mes.

jamon y vino

Dos súper alimentos

La dieta se basa en estos dos alimentos tan mediterráneos, que han demostrado tener grandes propiedades que benefician la salud. De hecho se encuentran en la lista de súper alimentos con los que se pueden incluso prevenir enfermedades. Hasta dicen que son muy recomendables para acabar con la astenia primaveral.

Muchos estudios científicos demuestran que un poco de vino mejora la tensión, e incluso ayuda a reducir los problemas de estómago. Hasta se están haciendo investigaciones porque los taninos podrían ser eficaces en la lucha contra el cáncer.

Por otro lado, el jamón ibérico contiene ácidos saludables como el oleico. Y un contenido en grasas saturadas inferior al de otros tipos de jamón. Incluso se ha eliminado de la lista de alimentos prohibidos si una mujer está embarazada.

La clave: que sean productos de calidad

Antes de lanzarte al supermercado para coger vino tinto peleón y jamón de sobre con la intención de adelgazar, debes saber que es fundamental que los alimentos sean de gran calidad. No vale con cualquier cosa, sobre todo porque estos dos productos se pueden encontrar en muchas variedades. Y no todas tienen las mismas propiedades.

Por eso, los expertos recomiendan elegir un buen vino tinto, como un matarromera crianza, para seguir la dieta de forma adecuada. Dependiendo de si quien sigue la dieta es un hombre o una mujer, la “dosis” puede variar entre una o dos copas al día, cuatro veces por semana.

¿Cuánto se puede comer?

Además del vino, el jamón es el complemento ideal de esta dieta tan deliciosa y saludable. La cantidad es de unos 150 gramos repartidos a lo largo del día, las mismas veces por semana que el vino.

Lo bueno del jamón es que se puede disfrutar con amigos y familiares como si se tratase de un tapeo. Nadie imaginaría que estás siguiendo una dieta viéndote con una copa de vino tinto y un poco de jamón. Por cierto, en jamonalia.es puedes encontrar muy buenos jamones, tanto por piezas como loncheados y envasados. Ideales para tener guardados y abrir según te vaya haciendo falta.

Evidentemente, no puedes comer solo esto. Además de que hay otros 3 días en la semana en los que no vas a hacer dieta. Lo que tienes que hacer es controlar qué otras cosas comes. Por ejemplo, evita el pan después del desayuno, come fruta y verdura fresca y que los lácteos sean desnatados. Las carnes magras y el pescado azul a la plancha también están aceptadas. Y como capricho, si te apetece algo dulce, un poco de chocolate puro.

Una dieta que no parece una dieta

Después de echar un vistazo a los pasos a seguir en esta dieta, hay que reconocer que sin duda es un plan de alimentación más que agradable. Y si encima, como indican los profesionales que la recomiendan, se pierden entre 4 y 6 kilos en un plazo de 4 semanas, estamos ante una forma de acabar con esos kilitos de más que es un verdadero placer.

Últimos artículos

Scroll al inicio