Hay muchas personas que disfrutan más con un buen postre que con los platos principales de la comida. La mayoría de los postres incluyen en su elaboración productos lácteos, cosa que es un gran problema para todas las personas que son intolerantes a la lactosa, lo que le puede hacer que sufran malas digestiones y malestar general.
Hasta hace años esto era un problema, y aquellos que tenían problemas con la lactosa tenían muchos problemas a la hora de comer un postre. Este problema cada vez es menor, gracias a que las empresas alimenticias tienen ya productos sin este ingrediente, lo que también hace que sea más fácil elaborar los típicos postres sin lactosa caseros. Dentro de los postres caseros, uno de los más ricos y sabrosos son los yogures, y dentro de ellos los de sabores. Por este motivo, hoy os queremos traer una receta para elaborar un yogurt de fresa listo para todas las personas que son intolerantes a la lactosa.
Para elaborar este rico postre tendremos que utilizar los siguientes ingredientes:
- Medio litro de leche de soja o leche sin lactosa.
- Cinco cucharadas de mermelada de fresa.
- Cuatro hojas de gelatina.
- Dos cucharadas de azúcar.
Para elaborar el yogurt, lo primero que tendremos que hacer es empapar las hojas de gelatina en un plato con agua fría. Mientras que estas hojas se van empapando, ponemos en un cazo a hervir la leche.
Antes de que la leche hierva, le añadimos las dos cucharadas de azúcar y removemos bien para que se mezcle bien. También le añadimos las hojas de gelatina, a la vez que vamos removiendo sin parar durante unos minutos. Cuando veamos que está todo bien mezclado, apagamos el fuego y dejamos enfriar.
Mientras que se enfría la mezcla, en unos vasos de cristal añadimos en el fondo la mermelada de fresa, para a continuación verterle encima la leche con la gelatina. Los vasos los dejamos enfriar en la nevera durante 4 horas aproximadamente antes de comérnoslo.