Mi madre es de las que cultiva calabazas en verano y las almacena en un lugar fresco y seco para utilizarlas durante la temporada de invierno.
Y por eso os quiero contar las tres formas en las que mi madre cocina la calabaza.
- Crema. Para hacer una crema de calabaza mi madre lo que hace es pelar y trocear la calabaza. Picar dos chalotas, y las salteamos junto con la calabaza en una sartén con un poquito de aceite de oliva, lo cubrimos con caldo de cocido o en su defecto con agua y lo dejamos cocer muy bien. Por último trituramos con ayuda de la batidora añadiéndole un poquito de nata líquida.
- Pastel. El pastel de calabaza que hace mi madre la verdad que tengo que deciros que está buenísimo, pero no es dulce, sino salado. Mi madre lo que hace es pelar y trocear la calabaza en dados, y las cuece en agua con un poquito de sal. En un bol mezcla huevos, queso rallado y nata líquida, y salpimentamos la mezcla. Lo horneamos al baño maría hasta que esté cuajado. Una vez cuajado lo cubrimos de queso rallado y gratinamos hasta que se derrita el queso.
- Salteada. Y la receta más sencilla de todas es calabaza salteada. Para hacerla simplemente tienes que pelar y cortar la calabaza en trocitos menuditos y saltearlos en una sartén con aceite de oliva y sal. Mi madre lo utiliza para acompañar pescados.
Y bueno aunque muchas más formas de cocinar la calabaza hoy sólo he querido contaros las formas en las que las cocina mi madre, a la que le debo mi pasión por la cocina.