Si cada vez que pelas cebollas pasas un auténtico calvario y tus ojos parecen decir que tu novio te ha dejado, toma nota de nuestros trucos para picar cebolla sin llorar.
¡No derrames ni una lágrima más por una cebolla, hay un montón de trucos para que nunca más tengas que llorar para pelar una cebolla! Y si ninguno de los que te contamos a continuación te funcionan… quizás unas gafas de buceo puedan ser tu solución.
Con nuestros trucos de cocina para no volver a llorar con las cebollas, esperamos dar solución a tu problema. ¡Toma nota!
- Encender una vela o el extractor de humo de tu cocina puede ser una buena solución para que los gases que emana la cebolla al picarse no lleguen a tus ojos.
- Trata de usar un cuchillo con buen filo, para no desgarrar demasiado la cebolla y mójalo con vinagre para evitar la llorera.
- Mojar la cebolla y el cuchillo en agua repetidas veces es otra posible solución.
- Poner la tabla de cortar más delante que nosotros para evitar que los gases entren en contacto directo con nuestros ojos.
- Congelar la cebolla es otra forma para evitar la liberación de esos gases que nos hacen llorar.
Además de estos clásicos trucos, Janet D. Stemwedel, colaboradora de Scientific American, realizo una investigación sobre otros métodos para evitar llorar a la hora de picar cebolla. En este vídeo se pueden ver los resultados:
Los métodos más eficaces, de mayor a menor, según la investigación son:
- Las gafas de bucear, ya que eliminan por completo el problema.
- Un ventilador soplando al lado de la tabla permite no llorar durante 106 segundos.
- Una cebolla congelada nos mantendrá 86 segundos sin llorar.
- Una vela encendida cerca de la tabla de cortar nos permite no llorar durante 80 segundos.
- Una cuchara en la boca nos hará no llorar durante 62 segundos.
- Una rebanada de pan en la boca nos mantendrá sin llorar 46 segundos.
Esperamos que entre todos estos trucos para no llorar con la cebolla encuentres tu solución… Quizás tener las gafas de buceo en la cocina se convierta en una nueva tendencia entre los más cocinillas, quien sabe.