Las albóndigas son una absoluta delicia que, además de su sabor, son recomendables para cualquier persona, de cualquier edad. Están hechas en su mayoría con carne, la cual aporta una gran cantidad de nutrientes. Además, esta clase de albóndigas no son fritas, sino horneadas, lo que las vuelve perfectas para complementar una dieta de adelgazamiento, sin sacrificar para nada una buena y deliciosa comida.
Aunque necesitaremos una cantidad apenas considerable de ingredientes, el modo de preparación es extremadamente sencillo. Para esta receta, necesitaremos:
-½ Kg de carne de res bien molida, preferentemente sin grasa
-1/4 de taza de cebolla finamente picada en cuadros
-1/2 cucharadita de tomillo
-1/2 cucharadita de orégano
-1/2 taza de mostaza
-½ taza de pan rallado
-1/4 de taza de leche (la de su preferencia)
-1 huevo
-1 cucharadita de sal y media de pimienta (o al gusto)
-1/4 cucharadita de nuez moscada
-aprox. 15 filetes de anchoa, partidas a lo largo (se colocará 1 anchoa por albóndiga)
-Berros (opcional, su función es más decorativa que otra cosa en este plato)
Para su preparación, simplemente necesitamos precalentar el horno a unos 175 grados y mezclar bien todos los ingredientes, exceptuando los filetes de anchoas, la mostaza y los berros, en caso de habernos decido por utilizarlos. Se comienza por hacer bolitas con la mezcla, no muy grandes, apenas de unos cuantos centímetros.
Después, se pondrán a enjuagar en agua fría los filetes de anchoas y se pondrán a escurrir, para quitar todo el exceso de agua. Una vez secas, se colocará un filete de anchoa por cada albóndiga, sujetándolas con palillos para evitar que se caigan. Una vez colocadas todas las anchoas, se les coloca una cucharadita de mostaza por encima a cada albóndiga.
Una vez colocadas las anchoas y la mostaza, se pondrá todo en el horno (preferentemente sobre una hoja para hornear) y se hornearán por aproximadamente unos 25 minutos. Una vez concluido este tiempo, se escurren bien las albóndigas para quitar el exceso de grasa y demás que contiene la carne y se colocan sobre los platos, adornándolos con los berros por los lados.