Abrirse paso en el mercado laboral de la hostelería de forma segura

Para nadie es un secreto que cuando se piensen en mercados laborales con amplias posibilidades de crecimiento y desarrollo profesional, la hostelería ocupa uno de los primeros lugares de la lista. Y es que pese a las restricciones que puedan tener otros sectores, este es uno que año tras año avanza, por lo que siempre se podrán tener buenas ofertas de empleo, siempre y cuando se cumplan todos los requisitos.

Al hablar de hostelería en España es necesario destacar que el país se encuentra entre los principales destinos para pasar las vacaciones en Europa. Esto quizá esté relacionado con las diferentes opciones que los viajeros encuentran, desde playas paradisíacas que nada tienen que envidiar al caribe, montañas llenas de nieve, ciudades modernas o por el contrario, lugares que parecen haber quedado atrapadas en el tiempo, hay de todo para elegir.

Apostar por el sector gastronómico

Así como son muchas las posibilidades sobre los destinos disponibles, algo parecido ocurre con la gastronomía. Para nadie es un secreto que la cocina española es de las más tradicionales y una de las favoritas de muchos en el mundo, quienes cada vez que llegan al país se maravillan entre su amplio abanico de sabores y colores.

Al igual que en cualquier lugar, el mercado gastronómico siempre va a representar una oportunidad de negocio bastante llamativa, tanto para trabajar como invertir. Y es que las personas aman comer, de allí que los restaurantes sigan siendo un sector que siempre se mantenga en alza, a pesar de las crisis y vaivenes de la economía.

Es por ello que trabajar en un restaurante es una alternativa muy favorable para aquellos que apenas comienzan a abrirse paso en el mercado laboral o incluso para quienes tienen ya experiencia.

Sin embargo, no solo se trata de ir a llevar el currículum y esperar llamada para la entrevista, es tener la certeza de cumplir con todos los requisitos en un mercado que demasiado tanto para quienes forman parte de él.

Por ejemplo, sacarse el carnet de manipulador de alimentos es un requisito fundamental para trabajar en restaurantes y establecimientos de alimentación. Trabajar en la preparación de comida requiere un alto grado de responsabilidad y salubridad, por lo que tanto las empresas como entes gubernamentales y sanitarios, mantienen un estricto control entre quienes practican esta actividad. Lo mejor de todo es que este carnet lo puedes sacar de forma online

Sacar el carnet de forma rápida y sencilla

Sacarse el carnet no es una tarea el todo complicada. El principal requisito es realizar el curso y aprobar el examen final que acredite como manipulador de alimentos homologado.

Aparte de la opción presencial, en la actualidad existen muchos sitios web que imparten estos cursos de forma gratuita y con la facilidad de que se puede realizar de manera online, es decir, sin tener que moverse de casa. Es necesario decir que si bien el curso no tiene ningún coste, para obtener el carnet si es indispensable pagar una pequeña cantidad de dinero a razón de aranceles.

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Cumplir con las regulaciones

El exigir este requisito no es precisamente un invento de los dueños y administradores de estos establecimientos. Este está estipulado en el Real Decreto 109/2010, encargado de regir todo lo relacionado con la regulación de la manipulación de alimentos.

Entró en vigencia en febrero del año 2010 y en él se establece las pautas de seguridad con la que deben cumplir todos aquellos que tengan contacto con alimentos, sin importar que se trate de un negocio pequeño o de gran tamaño.

Es importante establecer que este certificado no debe ser tomado como un simple requisito más, hay que tener siempre presente los riesgos a los que se someten los comensales cuando van a comer a un establecimiento público, pues el riesgo de contaminación por mal manejo de algunos ingredientes es sumamente alto, como en el caso de las carnes y diferentes proteínas animales, por ejemplo.

Conocer y manejar los procedimientos

La idea de este tipo de programas de formación es que quienes estén interesados en hacer carrera en este sector puedan manejar tanto en la teoría como en la práctica, todos los procedimientos necesarios para desarrollar esta actividad de forma eficiente pero sobre todo segura, aplicando para ello diferentes técnicas y procedimientos.

El carnet de manipulación de alimentos está disponible en dos modalidades, de alto y bajo riesgo. Este último es aquel que capacita a los estudiantes para trabajar directamente con los alimentos, como los cocineros, auxiliares de cocina, pasteleros, carniceros entre otros, mientras que el de bajo es para aquellos que se desempeñan dentro de un establecimiento de alimentos tales como un restaurante pero no intervienen en las preparaciones.

Es decir que de acuerdo con el puesto que se tenga en mente para postularse, dependerá de forma directa el tipo de carnet que se requiere y claro, tanto el nivel de preparación como la exigencia en la prueba es distinta.

Medidas higiénicas que debe tomar un establecimiento hostelero

No es ninguna broma… la higiene en general en un restaurante no solo es necesaria para prevenir la salud de los comensales, sino para preservar o mejorar la imagen del establecimiento. Algunas de las medidas que se han de tomar son las siguientes:

  • Revisar toda la mercancía. que esta se encuentre en perfecto estado y que además puede ser almacenada durante varios días.
  • Desechar todas aquellas latas o envases que no estén en perfectas condiciones.
  • Si el producto desprende un olor distinto al que emana normalmente, también desestimarlo..
  • Hacer una correcta separación de los alimentos y ubicar los crudos por una parte y los que requieren refrigeración por otra.
  • Recordar que un producto descongelado no se puede volver a congelar, salvo si este ha sido cocido.
  • Las tablas de corte para preparar los platos jamás deben ser las mismas para todos los productos.
  • no recalentar la comida más de una vez.
  • Lavar todas las frutas y verduras antes de su preparación.
  • Mantener una perfecta y frecuente higiene, sobre todo en las manos.
  • Y por supuesto, limpiar después de cada jornada.
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