El chocolate es un alimento que debe ser consumido con moderación.
Además de ser un riquísimo alimento, el chocolate es una excelente fuente de antioxidantes, magnesio y fósforo. Este posee una sustancia que lleva por nombre feniletilamina y es la encargada de desencadenar al comerlo, sensaciones similares a las de «estar enamorado«.
Cuando tenemos muchas ganas de comer chocolate se cree que es originado cuando las papilas sensoriales, que detectan el sabor del chocolate derritiéndose en tu boca, hacen que el cerebro produzca endorfinas.
Las endorfinas son una especie de drogas naturales que libera tu cuerpo para que te sientas feliz.
Por otra parte, se ha dicho hasta el cansancio que el chocolate se ha relacionado con acné, alergias, cálculos biliares, dolores de cabeza y caries. Sin embargo, se ha demostrado en varias ocasiones que no es así, como un ejemplo, podemos destacar que el acné no se genera por ningún alimento, ni siquiera, lo más grasos.
Ingredientes:
225 g de harina;
100 g de azúcar;
225 g de manteca (mantequilla);
1 cucharada de levadura en polvo;
50 g de chocolate en polvo;
1 cucharadita de esencia de vainilla.
Para preparar esta rápida y sencilla receta tenemos que colocar azúcar en un bol junto con la manteca y la vainilla y se baten todos los ingrediente hasta que se consiga una mezcla espumosa. A continuación se tamiza la harina con la levadura y el chocolate en polvo y se le va añadiendo lentamente a la preparación, mezclándose todo muy bien.
Una vez que este listo, se empiezan a formar bolitas con la masa que hemos obtenido y presionamos en el centro de este, con un tenedor para hacerle un adorno divertido.
Seguidamente, las metemos en el horno y las dejamos durante 3 minutos más o menos. A continuación se dejan enfriar y una vez que estén frías ya se pueden degustar.
