Quizá nunca lo habías pensado antes, pero la personalidad influye en el tipo de café que tomas. Cortado, solo, con leche… ¡Descubre cómo eres realmente!
Para gustos no hay nada escrito, dicen. A mi me atormenta la idea de que alguien pueda echar azúcar en el café o té. Otros piensan que cómo puedo yo no tomar azúcar con el café, con lo amargo que está. Con esto quiero llegar a que cada persona es un mundo por descubrir y que sus gustos dependen de cómo ha sido su infancia, cómo se ha criado y lo que ha ido descubriendo poco a poco. Es cierto que cuando somos más pequeños somos más reacios a probar cosas nuevas, ¿o es que tú eras la excepción que comía brócoli?
Hoy quiero contaros, no solo cómo es cada persona según el café que tome, sino que quiero hablaros de cómo un producto tan simple puede gustar tanto a las personas. También es cierto que es similar a cualquier receta de té: lo amas o lo odias. Existe ese tipo de gente que toma café para despertarse y luego estamos los que lo tomamos por placer. Porque sí, sin ninguna razón aparente y porque nos encanta el aroma, el sabor y la textura. Tomar café ha sido toda la vida un hecho imprescindible en cualquier casa. Hoy os quiero contar la personalidad de las personas según el tipo de café que toman. Y tú, ¿cómo tomas el café?
Amantes del café negro, con leche, cortado, capuccino… Estáis de suerte. Cada uno de los estilos de tomar el café viene acompañado de una personalidad y de personas diferentes con rasgos propios. Hoy queremos contarte qué tipo de persona eres dependiendo de cómo te guste el café.
Café solo
Gente sencilla que busca la felicidad en las pequeñas cosas y simples. Personas tranquilas con gustos minimalistas. Sin embargo, si la persona es amante del expreso o del café americano (doble), tienden a poseer liderazgo, adictos al trabajo y dispuestos a conseguir lo que se proponen. La gente que bebe el café solo se considera conservadora. Además, son muy pacientes pero resistentes al cambio.
Café cortado
Indecisos. Los que beben café cortado se decantan por una mezcla entre los que les gusta el café con leche y el solo. Ni sí ni no, dispuestos a cambiar de opinión de un momento a otro. Las personas que toman el café cortado se consideran, según el estudio, conformistas pero atentas. No les importa el tiempo (o perderlo), apuestan por una vida tranquila y sencilla. También tienen cosas malas, y es que no cuidan de sí mismos, pueden resultar pesados
Café capuccino
Personas que tienden a ser obsesivas y controladoras, pero siempre honestas y con un alto grado de motivación. Gente sociable y amigable a la que no le cuesta hacer nuevos amigos. Les gustan las cosas exclusivas y son amantes del chocolate y todos sus derivados. Son personas que les gusta hacer locuras y tienden a ser muy extrovertidos.
Café con leche
Aquellas personas que les gusta complacer a todo el mundo, son muy inseguros y suelen tener un toque neurótico en la personalidad. También las personas dulces y amables que les gusta ser cariñosos con todo el mundo. Estas personas, según el estudio afirma, son capaces de hacer varias cosas a la vez sin dejar a un lado la concentración. La mayoría del mundo toma o ha tomado alguna vez en su vida el café con leche y no por ello vamos a generalizar ni a encasillar a las personas.
Café con leche de soja
Estas personas suelen ser obsesivas, probablemente vegetarianas o veganas. Se trata de gente obsesionada por la salud y la figura. Perfeccionistas, acomplejados, dan gran importancia al control y al orden y también suelen ser rebeldes a la hora de pensamientos ideológicos. Son personas sensibles y que se preocupan por los demás.
Café instantáneo
Alegres, optimistas, sin a penas tiempo para nada y algo despistados. No es muy amante del café, puesto que no aprecia el buen café recién hecho en una cafetera. Aun así, lo toman por sobrevivir día a día y no caer redondos de sueño, una idea equívoca de que el café puede llegar a revivir a las personas. Aquellos que toman café instantáneo son relajadas y tienen una tendencia procastinadora, es decir, suelen dejar sus tareas para más tarde, llegando incluso a no hacerlas por posponerlas. No son detallistas y se toman la vida como se la han dado, sin intención alguna de cambiarla.
Este estudio no trata de generalizar ni encasillar a las personas, sino de aproximarnos un poco a conocer un poco más de nosotros, intentando descubrir cómo somos según nuestros gustos, intereses y sobre todo, los sabores. Ahora que sabes cuál es tu personalidad, ¿estás de acuerdo?