El comienzo de un nuevo año es una oportunidad genial para pensar en realizar renovaciones o en adquirir cosas nuevas que hace ya tiempo venimos postergando. No solo por lo que nos significa un nuevo comienzo con una sensación fresca, si no también porque podemos encontrar ofertas interesantes por las fiestas.
Si pensamos en innovar, muchas veces se nos viene a la cabeza nuestro closet o la decoración de nuestro hogar, sin embargo, no debemos olvidar la importancia de uno de los sitios más importantes de toda casa: la cocina.
Si estás pensando en cambiar tu refrigerador, aquí te contaremos algunos de los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de elegir el modelo ideal para ti.
Piensa en tu espacio
A la hora de elegir cualquier mueble y electrodoméstico, resulta esencial pensar en primer punto en el espacio que tenemos disponible. Una vez definido el lugar en donde colocaremos nuestra refrigeradora, debemos tomar las medidas del espacio (alto, ancho y altura).
En este sentido, no solo importa el espacio si no también la capacidad. Si vives en familia, con varios integrantes, resultará necesario evaluar refrigeradoras con una capacidad de 360 litros como mínimo.
Si, por otro lado, vives solo o con tu pareja y quieres optimizar tu espacio, puedes optar por comprar una refrigeradora pequeña de 250 litros. Esta capacidad será suficiente para estos casos, y significará una inversión menor que una refrigeradora de gran tamaño.
¿Y el congelador?
Este también es un apartado a considerar en relación con el espacio que tenemos disponible para nuestra nueva refrigeradora. Optar por un modelo con freezer nos permitirá mantener alimentos congelados correctamente; mientras que los modelos sin freezer cuentan con un congelador, ocupan menos espacio y son más económicas, pero su capacidad de congelar es menor.
Si por otro lado sueles tener en tu nevera muchos alimentos congelados, quizás te resulte conveniente optar por neveras Mabe, por ejemplo, que cuenten con “bottom freezer”.
Las refrigeradoras Mabe modelos de este tipo cuentan con un mayor espacio de almacenamiento en el freezer en comparación con los modelos que tienen el freezer en la parte superior (“top mount”), dividiendo el espacio entre la parte de refrigeración y de congelados de manera casi equitativa.
Cabe aclarar, de todas maneras, que esta refrigeradora Mabe precios son un poco más elevados que las refrigeradoras Mabe con un freezer convencional, pero resultan una gran inversión si acostumbras hacer meal prep, por ejemplo.
Si, por otro lado, estás pensando en adquirir una refrigeradora con una gran capacidad (entre los 600 y los 700 litros), los modelos “Side by Side” son la opción ideal para ti. Estos cuentan con dos puertas una al lado de la otra, teniendo el freezer en una mitad y el refrigerador en la otra.
Tecnología de enfriamiento
En este apartado, podemos nombrar tres tipos de heladeras según la tecnología con la que cuentan, la opción ideal dependerá de tus preferencias y de tu presupuesto.
Nevera cíclica
Este tipo de refrigeradoras son las mas clásicas y las más económicas.
Este tipo de neveras cuentan con una placa para generar frio en cada compartimiento (es decir, una en el freezer y otra en el refrigerador).
El tipo de enfriamiento de estos modelos es húmedo, por lo que mantiene correctamente la humedad de los alimentos por un buen tiempo. El contra de este tipo de refrigeradoras es que generan escarcha, por lo que resulta necesario descongelarlas manualmente cada seis meses como mínimo para evitar que se acumule la escarcha.
Nevera “No Frost”
Este tipo de refrigeradores son de enfriamiento seco. Esta tecnología evita que se genere escarcha, y por ende, no tendremos un problema de acumulación de la misma. Esto significa que no resulta necesario descongelar manualmente nuestra refrigeradora, facilitando considerablemente el mantenimiento de la limpieza de la misma.
El frio seco se genera en el freezer, y se distribuye de manera descendente y constante hacia el refrigerador.
Nevera “Neo Frost”
Estos modelos de neveras son una especie de híbrido entre los dos anteriores. Utilizan la tecnología de enfriamiento seco en el freezer, evitando así la generación de escarcha; pero el refrigerador cuenta con un sistema cíclico de enfriamiento húmedo, lo que provoca que los alimentos se mantengan frescos y húmedos por más tiempo.
Ahorro energético
Es sabido que la nevera es uno de los electrodomésticos que produce un gran consumo de energía. La clasificación energética de los distintos modelos nos permitirá considerar que tan eficaces son a la hora de consumir energía.
Optar por refrigeradoras de clasificación “A” nos permitirá ahorrar mucho dinero en nuestras boletas de luz, se estima que hasta un 48% por año.
Accesorios y funciones especiales
Si cuentas con un presupuesto no muy ajustado, quizás pienses en adquirir una refrigeradora con algunos complementos que se le suman a sus funciones básicas.
Algunas neveras cuentan con un tratamiento antibacterial, esto permite evitar los olores desagradables y mejorar la conservación de los alimentos gracias a la protección de los agentes nocivos con la que cuentan.
Algunas funciones especiales que podemos encontrar también en las refrigeradoras de alta gama son, por ejemplo, el modo vacaciones (permite mantener la temperatura de congelamiento al mínimo durante un tiempo determinado) o la capacidad de enfriamiento rápido de los alimentos.
En cuanto a los accesorios, podemos encontrar modelos de refrigeradoras que cuenten con control digital de la temperatura o dispenser de agua y hielo.
Por fuera de lo técnico
Tener en cuenta todos los aspectos nombrados anteriormente resulta muy importante a la hora de pensar en una buena experiencia de uso y en la practicidad del refrigerador en el día a día. Sin embargo, las neveras son una parte fundamental de cada cocina, por lo que no debemos dejar el estilo de lado.
Es por eso que puedes elegir entre distintos colores, como los clásicos plateados o blancos u otros más arriesgados para que combine con el resto de tu cocina y electrodomésticos. ¿Cuál será tu elección?