Hoy os cuento una cosa muy curiosa y útil para estos momentos en los que la crisis se palpa en el ambiente y también en la cocina.
Dos formas de cocción que gastan muy poquito.
La primera es al vapor. Con esta forma de cocinar se conservan mejor las propiedades del alimento. Hay que poner el producto en una rejilla que se coloca dentro de una cacerola con agua en el fondo. Los alimentos no estran en contacto con el agua, por eso se trata de cocción al vapor y no hervido.
Hay aparatos muy útiles para llevar a cabo cocina al vapor, cacerolas especializadas como esta que os enseño.
También podemos cocer marinando. Esta técnica consiste en dejar un alimento en remojo de un líquido aromático durante media hora en la nevera, para realzar su sabor y dejar la carne más tierna. Se usa mucho para carnes rojas y de caza, aunque también para algunos pescado. Para la elaboración del líquido de marinación se usan especias o hierbas aromáticas, además de vinagre, vino, limón y aceite de oliva. Debes tener en cuenta que es como un adobo, los alimentos no se cocinan con el líquido.
Vía: Cocian mia nro 103
