Con la llegada de la primavera llegan los guisantes frescos, porque aunque los puedes encontrar congelados todo el año, consumirlos frescos puede ser una manera de aprovecharte de su potencial nutritivo.
Lo primero que os voy a decir es algo que seguro que os sorprende, ya que el guisante no es una verdura, sino una legumbre. Seguro que más de uno y una no tenían ni idea.
Además he de deciros que los guisantes combaten el estrés. Si como habeís leído.
Porque además de proteínas y minerales como el hierro, zinc o calcio, son muy ricos en B1 ( incluso más que el hígado).
Una porción de 150 gramos proporciona la mitad de la B1 que un adulto necesita al día.
Los guisantes son imprescindibles para el buen funcionamiento del sistema nervioso, y además mejora la conciliación del sueño, así como el estado de ánimo.
La deficiencia de los nutrientes que proporcionan los guisantes puede provocar estrés.
Y lo bueno de los guisantes es que se pueden cocinar de una infinidad de formas, cocido, sofritos, frescos, en purés, …
Imagen: blog.diariovasco
Vía: saber vivir, nro 101