La problemática de la obesidad en el País Vasco se ha convertido en una de las principales preocupaciones de salud pública, con datos alarmantes que revelan que el 46,4% de la población adulta sufre sobrepeso y un 16% padece obesidad. En Gipuzkoa, esta situación es igualmente crítica, afectando especialmente a personas de mediana edad y en entornos urbanos.
La endocrinóloga Eva Blázquez, jefa del servicio de endocrinología en Policlínica Gipuzkoa, destaca que la obesidad no debe considerarse simplemente un problema de voluntad, sino que es una enfermedad crónica que requiere un enfoque integral en su tratamiento. Según Blázquez, «dos de cada diez personas sufren de obesidad actualmente», y se estima que esta cifra podría aumentar a tres de cada diez para el año 2035.
La obesidad no solo tiene un impacto en la salud física, sino que también afecta la salud emocional de quienes la padecen, generando sentimientos de frustración, ansiedad y aislamiento social. Ante esta situación, la doctora resalta que «los nuevos fármacos contra la obesidad permiten una pérdida de peso superior al 23%, lo que supone una revolución en el tratamiento».
Policlínica Gipuzkoa promueve un enfoque multidisciplinario que abarca nutrición personalizada, ejercicio físico adaptado y apoyo psicológico. En algunos casos, se considera la cirugía bariátrica como una opción, aunque el cirujano José Luis Elósegui advierte que «la cirugía no es una solución mágica». Los pacientes deben aprender a adoptar hábitos alimenticios saludables y mantener actividades físicas para consolidar los resultados obtenidos.
La obesidad está vinculada a enfermedades graves como diabetes tipo 2, hipertensión, apnea del sueño, artrosis y afecciones cardiovasculares. La situación en la infancia es igualmente preocupante, con uno de cada diez menores presentando obesidad y un tercio teniendo exceso de peso, según datos nacionales.
